Todavía quedan cosas que contar en nuestra sección ‘como aumentar el valor de mi coche’, además, lo que te voy a contar ahora puede hacer que el valor de tu coche pueda elevarse hasta 500 euros, porque no hay nada como presentar un coche con un interior en perfecto estado. En muchos casos, no importa el exterior si el habitáculo está perfecto. Y es todavía mucho más recomendable si tu amigo lector, eres fumador.

Piensa en las veces que han entrado en un coche nuevo, en su olor, en su aspecto, en el tacto de los elementos… es genial, ¿verdad? Bueno, ¿y por que no lo haces con tu coche usado? Es muy fácil y tenemos varias opciones para hacerlo; la manera barata y la que requiere algo de inversión por nuestra parte.

Vamos a comenzar como siempre por la barata porque, además de ser la que seguramente escogerá más gente, es la más corta: agua y jabón y unas bayetas. No necesitas más para limpiar el salpicadero de tu coche. Ten cuidado no uses demasiado agua, que tras todos esos plásticos se esconden conexiones eléctricas y pueden estropearse.

La ‘de pago’ es más larga y complicada, pero el resultado es cien veces mejor y no requiere un gasto excesivo. Y digo que es la de pago porque o bien, llevas el coche a un taller especializado y que te lo dejen como una patena desde unos 120 euros, o bien, te remangas y lo haces tú ya que por unos 40 o 50 euros tendremos todo lo necesario e incluso, podremos usarlo en más ocasiones. Para ello, tienes que comprar una serie de productos que puedes encontrar en esos mismos talleres especializados, los tienes desde unos 3 euros hasta unos 20 euros. Tienes productos limpiadores y otros que sirven para rejuvenecer y quitar arañazos.

El proceso en ambos casos es el mismo, sumándole la aplicación de los productos pertinentes en el caso de que hayamos elegido comprarlos. Primero debemos quitar todo el polvo, sobre todo de los aireadores y de los rincones (acordaos que puede haber ceniza si eres fumador) y posteriormente, lo mejor es pasar una bayeta de microfibra con agua tibia. Si tenemos el producto necesario, una vez seca la zona, aplicamos con cuidado y dejamos secar. Hay plásticos que cuestas un poco más limpiar, como lo rugosos así que paciencia y mucho cuidado.

Los productos que rejuvenecen los plásticos siempre se aplican al final, una vez todo limpio, al igual que los quita arañazos. No obstante, éstos últimos solo merecen la pena sobre los plásticos duros. Para los transparentes, como los de la instrumentación, con un producto pulidor de plásticos y frotando con suavidad quedan perfectos.

Tú eliges, pero no tienes excusa para no ponerte manos a la obra.